El mazapán es, al menos para mi, un manjar, sencillo de hacer, con muy pocos ingredientes, pero muy rico. La masa se puede moldear fácilmente por lo que se moldean figurillas sin ningún problema con las formas que se deseen.
En algunos casos se usa patata para la realización del mazapán pero yo aprendí de mi madre que el bueno, el de verdad, es el que se hace solo con almendra, que la patata o fécula se mete para que cunda más y cueste menos.
Hay varias recetas pero os dejo una muy sencilla y que da muy buenos resultados. Sólo lleva harina de almendras, azúcar glas y un huevo.
Con esto salen unas 25-30 piezas de unos 15 g
200 g almendra molida
200 g de azúcar glas
1 huevo
un chorrito de leche
MODO DE HACER:
1.- Se mezcla bien la almendra molida con el azúcar glas
2.- Se separa la clara de la yema y se reserva la yema.
3.- Se levanta la clara a punto turrón, es decir hay que batirlo más que cuando espuma pero dejar de batir antes de que empiece la textura de pico.
4.- Verter la clara sobre la mezcla de almendra y azúcar.
5.- Amasar de forma que quede una masa moldeable.
6.- Pesar pellizcos de masa de unos 15 g cada uno y hacer las figuras de las formas que queramos.
7.- Poner las figuritas en una bandeja de horno que tenga un papel o silpat.
8.- Pintar las figuritas con la yema de huevo que hemos reservado. A mi me gusta echarle un chorrito (pero muy pequeñito) de leche a la yema para que sea más fluida y sea más fácil pintarlas.
9.- Meter en el horno pero solo para que coja color el huevo con el que los hemos pintado.
Yo he hecho: ochos, trenzas, panes redondos, panecillos, tres bolitas juntas..., las podéis ver en las fotos.
Apto para celiacos
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